jueves, 26 de marzo de 2015



Red Bull podría estar preparándose para ser constructor de motores y fabricarse al 100% su propio coche. Esto provocaría el cese de su contrato con Renault, con quien la marca de la bebida energética se ha enfrentado dialécticamente tras el Gran Premio de Australia. Todos esos comentarios coparon los titulares de la prensa. Tras toda esa polémica, Abiteboul subió a su cuenta de Twitter una foto en la que se veían un par de guantes de boxeo, con el texto: "De viaje a Malasia". Y en Sepang, Abiteboul y Christian Horner coincidirán en la rueda de prensa oficial de la FIA. De hecho, Renault se está planteando regresar a la Fórmula 1 como constructor. Desde el fabricante francés se respondió a las acusaciones de Red Bull, ya que Cyril Abiteboul acusó de mentiroso a Adrian Newey respecto a la verdadera falta de ritmo del RB11. Pero mientras la marca francesa se plantea regresar a la Fórmula 1 como constructor, también se estaría planteando Red Bull buscar un futuro sin la ayuda del fabricante francés. Por lo que parece, Mario Illien, propietario de Ilmor, ya le está echando un vistazo al motor V6 Turbo de Renault y está buscando soluciones. Red Bull también querría probar las mejoras que Ilmor prueba en la sede de AVL, una compañía de motores independiente. Y para añadir certeza a la situación, Michael Schmidt, corresponsal de Auto Motor und Sport, ha dicho que Red Bull ya ha pedido crear su propia VTT ('Virtual Test Track' o pista de test virtual). Según Schmidt, Mercedes y Honda son las únicas compañías que poseen una VTT, que permite probar todo un coche bajo un mismo techo. "Cuando se pregunta a un equipo qué es lo que necesita como un buen medidor de su capacidad, solo hay una respuesta: convertirse en fabricante de motores". A pesar de todos estos desacuerdos públicos y de la rumorología imperante, parece que reinará la paz en la unión Red Bull-Renault. El periodista alemán Ralf Bach explica en su blog f1-insider.com que Abiteboul se ha disculpado por su comportamiento, justificando su actuación al decir que el consejo directivo de Renault le había dicho que respondiera públicamente a Red Bull. "Este desacuerdo está solucionado y estamos dispuestos a mirar hacia adelante y a trabajar juntos", añadió Helmut Marko, para restar importancia al asunto. Esta calma puede ayudar a que Red Bull y Renault puedan trabajar en sus planes de futuro. "Analizaremos la situación durante el año y entregaremos las soluciones que hayamos encontrado a nuestro consejo directivo", dijo Abiteboul a f1news.ru. "En cualquier caso, no es un plan que se desarrolle solo esta temporada. Tenemos un contrato de dos años con Red Bull, que se acaba en 2016, y pretendemos cumplirlo".

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